¿Sabes cómo se cortejan los pingüinos?
El macho trata de seducir a la hembra y convencerla para que forme pareja con él, le hace juegos con su cuerpo para enamorarla, pero fundamentalmente para conseguir la aceptación de la hembra, le pone un caminito que la conducirá al amor, un camino de piedritas, que él va construyendo hasta la entrada de su nido, cuando ella se enamora, lo amará toda su vida y claro! Él a ella…
Esta vez no… Otra vez no!!!
Yo te amo, te amo, pero ya no te creo.
No te puedo creer, aunque todo esto sea muy lindo, muy mágico, especial, inolvidable, yo soy de carne y hueso, llevo sentimientos en mi ser, no quiero soñar con el amor, quiero vivirlo, quiero tener el amor, quiero poder decir que es mío, que es nuestro.
Sí! te extraño y cuando te lo digo; respondes “Ya estoy aquí” y es cierto, estás, te tengo aquí en el lado derecho de mi cama, pero qué, ¿qué pasará al despertar?, dentro de unas horas, ¿qué pasará después del amanecer?, ¿qué pasa después que te vas?, ¿qué pasará si alguien te pregunta por mí… le dirías que me amas?.
No, no te creo, ya no te quiero creer, no te puedo creer, sé que te amo, pero quisiera poder olvidarme de eso, no saber qué significa, olvidarme a propósito, tener amnesia voluntaria.
Ya no me preguntes si te amo… Ya no te preguntes si te amo… Ya no importa si te amo o no.
Te amo, claro que te amo, y debo pedirte perdón, pero ya no quiero sufrir más, te juro que no quiero sufrir más, no quiero seguir buscándote, no quiero seguir perdiéndote, porque cada vez que te tengo aquí, conmigo, cada vez que hacemos el amor y me dices “eres mi mujer, para siempre”, cada vez que pienso que va a ser para siempre, te me escapas, te vas, no sé si mañana me hablarás, si me responderás, si regresarás, y este dolor de no saber se vuelve recurrente, sé que regresarás, pero también sé que cuando te tenga sentiré miedo de cerrar mis ojos y cuando los abra ya no estés, pero esta vez no… Otra vez no!!!