Mi hijo me pregunta estos últimos días: -“¿Escribiste tu carta a los Reyes Magos, Mamá?”
Siempre respondo lo mismo: - No he tenido tiempo hijo…
Me puse a meditar y veo que no he podido dedicarme ese tiempo, “mi tiempo”, donde pueda pensar únicamente en mí, en lo que quiero, en lo que necesito, en lo que me gusta y no me gusta, en algo sólo para mí.
No quiero convertir esto en la asignatura pendiente, mucho menos arrastrarlo, es evidente, debo frenar un poco y regalarme eso que es necesario…
Mi vida:
Una cadena interminable, cada eslabón unido al otro, sin pausa, haciendo siempre algo y algo y algo. Yo, que muchas veces presumo de reglas, orden, métodos, formas, etc. No logro aplicarlo en eso tan maravilloso que se llama “mi tiempo”
Sin embargo aquellos instantes, hacen que mi vida valga la pena vivirla y disfrutarla así, revalidando mis sueños. Vaya!!! Ya pesan mis canas!!! Toman fuerza!!!
Sí! Lo admito, cerrar este año me está costando y mucho.
Dicen que las personas que sobresalen a las adversidades, es porque son bendecidas, que Dios las eligió para ser mejores y fortalecerlas, sí es así entonces no queda más que ser agradecida.
Cerraré con esa maravillosa palabra: GRATITUD
Mi hijo:
Qué importante resulta su compañía, cada día me sorprende más, siempre sobresaliente, es todo lo que deseo, verlo sonreír y tenerlo a mi lado, llenarme con sus besos, haciéndome sentir orgullosa, el firmamento está en sus ojos. Muere por lo que cree, cómo yo, es mi yo chiquito.
Cerraré con esa maravillosa palabra: FORTALEZA
Mi familia:
Mis padres, mis hermanos, sus hijos. Siempre cerca, cuando la familia se quiere y es unida no hay distancias marcadas. Más que suficiente para sentirme plena en el aspecto familiar.
Cerraré con esa maravillosa palabra: UNION
Mi trabajo:
Estoy más que complacida, me apasiona lo que hago, trabajo en lo que me gusta, es aprender constantemente, es ganar experiencia, es crecer, es compartir, es vivencia, es unión, es equipo, es amistad y encima ¡me pagan!
Cerraré con esa maravillosa palabra: SOLIDARIDAD
La amistad:
Tengo por amigos los mejores de este mundo. A mi vera; mis mejores amigas, con las que puedo compartir todo, risas, lágrimas, triunfos y derrotas, buenos y malos momentos.
Mis amigos, siempre pendientes de mí, distribuidos pero presentes, con ánimos para cada momento, tengo la certeza que están ahí, no me queda más que creer que realmente soy privilegiada por coincidir con ellos en esta vida.
Cerraré con esa maravillosa palabra: LEALTAD
Lo privado:
Adoro a esa persona que no deja de estar presente, ese maravilloso ser de luz, que llena mis espacios, que hace brotar de mi ser muchas sonrisas, la que me hace sentir libre, gracias por hacerme tan feliz en cada estación de este año! Sé que no me lastimarías.
Cerraré con esa maravillosa palabra: CONFIANZA
Caigo en cuenta, por qué me está costando cerrar este año…
Bueno, prometí que escribiría la carta a los reyes magos…
Mientras tanto lo que más deseo en esta Navidad es ver su carita de mi hijo cuando sonríe y perpetuar ese momento… Qué felicidad!!!
Pues ahora cierro diciendo: Gracias por lo que tengo, por lo que sueño y por lo que soy.